05 de Mayo de 2009
La mandaron al colegio en lugar de a la cárcel
"Es la mejor manera de reinsertarse en la sociedad", le
explicó a Críticadigital la jueza de Rosario que decidió darle
una nueva oportunidad a una joven delincuente de 19 años.
La jueza Gabriela Sansó piensa que "hay que evitar la
aplicación de penas privativas de la libertad que no sean
absolutamente necesarias" y determinó que además de las
reglas, deberá abstenerse de consumir drogas y de abusar de
bebidas alcohólicas.
La jueza de Menores de la segunda nominación de Rosario,
Gabriela Sansó, determinó que un joven de 19 años, que cuando
era menor de edad cometió varios delitos, deberá completar la
escuela primaria, capacitarse laboralmente y lograr un empleo
remunerado para evitar ir a la cárcel. “Es la mejor manera
para fijarle pautas de conducta para que pueda reinsertarse en
la sociedad”, expresó la letrada a Críticadigital.
Según contó Sansó a este medio “los jueces de menores cuentan
con dos instancias para el juzgamiento de delitos, la primera,
en relación a la autoría del hecho y de ella se desprende la
eximisión o la aplicación de penas, en este caso puntual el
acusado fue encontrado autor de tentativa de robos de tres o
cuatro hechos contra la propiedad privada pero exentos de
violencia, no considerados como de extrema gravedad, entonces
se le debía aplicar una sanción y apelando a la escala penal,
correspondía la sanción que aplique”.
En cuanto a lo novedoso de la sanción fue optar por la
ejecución condicional por sobre la efectiva. En este punto la
magistrada dijo: "Pienso que es la mejor manera para él,
fijarle pautas de conducta y así poder reinsertarse en la
sociedad, sobre todo teniendo en cuenta los cambios favorables
de actitud que tiene, ya que formó una familia, tiene un hijo,
de esta manera sin eximirlo de pena la misma la cumplirá en
libertad".
El muchacho fue hallado culpable de cometer varios robos en
viviendas particulares y en autos estacionados en la vía
pública. En la resolución, la jueza sostuvo que "hay que
evitar la aplicación de penas privativas de la libertad que no
sean absolutamente necesarias" y determinó que además de
imponerle varias reglas de conducta, deberá abstenerse de
consumir drogas y de abusar de bebidas alcohólicas. La condena
fue de tres años de prisión de ejecución condicional.
"La prisión posterga el ingreso del joven en una vida
productivamente activa con inclusión en la actividad laboral",
sostuvo en el fallo Sansó y agregó que "se debe perseguir, no
el castigo, sino la recuperación del joven involucrado en el
delito, para que advierta el error y modifique su vida para un
buen desarrollo personal". Por eso deberá completar la escuela
y capacitarse para conseguir un trabajo.
La metodología de control de esa pena condicional
corresponderá al juez de ejecución encargado del cumplimiento
de las pautas de conductas. Este mecanismo ya es utilizado
generalmente para los mayores, “lo extraordinario de este caso
es que se imponga a los menores” reconoció Sansó.
Entre otras cosas debe llevar adelante un tratamiento medico
psicológico supervisado por la Dirección de Control y
Asistencia Post Penitenciaria “con la finalidad de implementar
las pautas de conductas, conseguir la escolaridad y
capacitación laboral, generar vínculos para conseguir un
trabajo", expresó la magistrada, quien además consideró que en
este caso se facilitará la intervención de personal del
juzgado que ella administra como los asistentes sociales.
El cierre de la entrevista con Criticadigital una
pregunta quedó pendiente:
¿Qué piensa sobre la baja de la edad de imputabilidad?
- No se puede pensar que esto vaya a disminuir la inseguridad,
pero si se baja la base etaria tiene que ser con un régimen
especial y distinto al de los mayores. Siempre a través de un
juicio justo con lineamientos especiales porque los menores no
están en condiciones similares a los mayores. Desde la ley
podemos darle un marco legal que si son tratados desde el
ámbito penal se le deben dar garantías al proceso. No se trata
de aplicar mas penas sino de ver que tipo de solución se le da
a esa franja que no están siendo atendidos de ningún modo.
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