Estamos con Carlos
March
CM: Soy Director Ejecutivo de Poder Ciudadano
¿Cuáles son los orígenes de
Poder Ciudadano y su propia incidencia personal
(si la hubo) en ellos o cuando fue su inserción?
CM: ¿Incidencia dentro de la institución?
Si, ¿cómo y cuándo empezó
CM: Poder ciudadano es un espacio que se crea en el año
89 como fundación a partir de la iniciativa de seis personas.
Entre ellos Luis Moreno Ocampo que en ese momento era fiscal
federal y actualmente es fiscal de la corte penal
internacional, Marta Oyhanarte que en ese momento venia de
sufrir todo el proceso del secuestro de su marido, Mona
Moncalvillo, periodista; Manuel Araujo, sociólogo, Víctor
García Laredo, empresario en ese momento del Grupo Socma y
Teresa Anchorena, una persona vinculada al mundo de las artes.
Estos fueron los seis fundadores que crean esta institución.
La idea original y actualmente en vigencia es involucrar a los
ciudadanos en la participación democrática más allá del
voto, en el control de la gestión pública y en la incidencia
en políticas públicas. En ese momento se decidieron crear
cuatro áreas de trabajo orientadas a mejorar la
representatividad política, trabajar por la educación para
la participación, generar programas de control de corrupción
y transparencia y democratizar la justicia. Esas son las
cuatro áreas principales y diría que habría una quinta que
se desactivó porque había organizaciones que la venían
trabajando que era, seguridad ciudadana. Hubo 3 o 4 años
de desarrollo de ese programa pero después se desactivo y
actualmente no estamos haciendo actividades en esa área.
Y de mi inserción personal, estoy desde que se creó, estoy
en el acta fundacional asi que me incorporé muy joven, tenía
22 años y estuve 7 u 8 años como voluntario
participando intermitentemente. En el año 97 estuve a
cargo del banco de datos de jueces, que terminó en una
publicación.
¿A partir de cuándo asumió
su cargo como ejecutivo?
CM: Como Director Ejecutivo asumí en enero del 2000
¿El cargo, que
responsabilidades le acarrea?
CM:Bueno el rol de Director ejecutivo, como en la mayoría de
este tipo de organizaciones es básicamente implementar las
estrategias que define el consejo de administración, en ser
el nexo entre el consejo de administración y el staff,
ocuparse de los aspectos institucionales, de financiamiento,
fortalecimiento institucional, presentación de programas,
orientar algunas líneas de trabajo en cuanto a las partes
sustantivas del programa de la fundación y representar
institucionalmente a la institución de manera pública y en
los medios.
¿Cuáles son sus motivaciones
para trabajar de manera solidaria, que usted encuentra o son
personales, los que lo pone a trabajar en Poder Ciudadano?
CM: Yo creo que sí, básicamente es una decisión personal.
En esta organización digamos no hay un perfil solidario, o de
bien publico como se la suele conocer típicamente a Caritas
por ejemplo. Esta es una institución que está mucho más
cercana a la incidencia en políticas públicas. Esta es una
institución política, no partidaria, pero netamente política
y estuve ligado a esa inquietud desde chico. Fui presidente
del centro de estudiantes de mi colegio secundario durante dos
años y cuando fui a la facultad no me inserté en ningún
espacio estudiantil porque sentía que no se hacía
gremialismo estudiantil, sino que eran plataformas de
lanzamientos de partidos políticos y cuando se crea el
espacio de Poder Ciudadano inmediatamente me vuelco ahí; y
después estudié periodismo como una herramienta de
militancia social y pública, no por la profesión en si. He
hecho colaboraciones en medios graficos pero no trabajé nunca
dentro de una redacción y esta institución mezcla mucho la
parte de comunicación social con la parte de la incidencia en
políticas publicas, entonces para mi era un espacio ideal. Así
que lo mío es puramente egoísta.
¿Qué evolución encuentra
entre los comienzos de Poder Ciudadano que ve como un quiebre,
como un viraje desde los hasta los últimos 4 años?
CM: Si, yo creo que hubo un fuerte posicionamiento en los 4 o
5 primeros años de vida de Poder Ciudadano, después
hubo como una meseta donde no voy a decir que se debió a que
nos dormimos en los laureles, pero si hubo como una especie de
estancamiento, y en los últimos 3 o 4 años se vuelve
con más fuerza a una presencia pública más notoria. Tambén
se da una expansión más fuerte en su estructura. Hay una
reingeniería organizacional, como se le dice ahora, que nos
permite optimizar recursos y empezar a plantear nuevamente
estrategias que nos permitieron reposicionar a la institución
como uno de los espacios referentes en la sociedad civil en
materia de incidencias en políticas publicas.
Bueno, otra pregunta que estaba
relacionada, ya que mencionó la inserción es: ¿Cuáles
cree que son los problemas de la falta de inserción más
profunda de Poder Ciudadano en la sociedad, especialmente en
los sectores más bajos o los estudiantes?
CM: Creo que hay un punto de inflexión a partir de la crisis
que termina con el gobierno de De la Rúa. A mi me parece que
ahí hay un punto de inflexión, donde pasamos de una sociedad
totalmente dormida, desentendida de la democracia, salvo a la
hora de votar y a partir de la crisis de diciembre de 2001,
hay un fuerte grupo, prácticamente un sector de la clase
media que estaba totalmente desentendida de la participación
activa de la democracia que se vuelca a la participación y se
generan nuevos espacios. Igualmente, a mi me parece que hay
una gran fragmentación en la sociedad civil. Hay cerca de
80.000 organizaciones no gubernamentales lo que es una
barbaridad. Hay una gran incapacidad para articularse, y me
parece que también hay una gran incapacidad para, en ciertos
temas, lograr que los sectores más vulnerables liguen la mala
política a su mala calidad de vida y eso es un tema que hay
que trabajar. Es totalmente comprensible que una persona que
tiene que dar de comer a cinco chicos su prioridad no sea como
se elige un juez, pero hay que empezar a trabajar con esos
sectores para que entiendan que en definitiva, esa es una de
las bases que la sociedad necesita para ser mas justa.
Pero claro, ¿cómo que uno
debe, si puede tratar de incorporarlos a ellos.
CM:Exactamente, y que ellos mismos entiendan que un mal juez o
buen juez a la larga va a incidir en su calidad de vida,
porque va a tomar decisiones que van a impactar directa o
indirectamente en su calidad de vida. Entonces, nos parece que
la inclusión cívica es el paso previo a la inclusión
social, y tengo entendido, me parece, que hay muchas
organizaciones que trabajan el tema de institucionalidad que
son organizaciones típicamente de clase media, no porque
elijan ser de clase media, sino porque los temas decantan a
otros sectores más vulnerables. Bueno, ahí se va a tener que
hacer un esfuerzo muy fuerte desde este tipo de
organizaciones. Poder Ciudadano, por suerte, diría en el último
año, ha trabajado con algunos sectores vulnerables,
específicamente con un grupo con que estamos interactuando
fuertemente en construir ciudadanía e incorporar en el
trabajo que hace esta organización, que básicamente es una
organización de base que trata de generar micro
emprendimientos, inclusión laboral, empezar a, también,
trabajar el tema de la agenda de la institucionalidad.
¿Y qué mecanismos o
herramientas tiene el ciudadano para la participación política?
CM: Bueno... hay muchas herramientas...
Pero por ahí es como que uno lo más
comúnmente dice: “bueno, el voto”...
CM: Sí, el voto es una de las herramientas, que
lamentablemente en la Argentina, por el carácter de
funcionamiento de los partidos políticos, no terminas
eligiendo a tu representante, sino que terminas legitimando
decisiones tomadas por aparatos partidarios totalmente
alejados de lo que está pidiendo la gente. Pero después hay
otras herramientas de participación semi directa como se les
dice, como la iniciativa popular que le permite a los
ciudadanos, reuniendo una serie de requisitos, presentar
proyectos de ley y el congreso se queda obligado a tratar. Tenés
las audiencias públicas, que son un marco en donde el
empresario más poderoso y el vecino menos poderoso discuten
temas en un plano de igualdad. Bueno, en algunos lugares a
nivel nacional, se esta reclamando la ley de acción y de
información pública, para pedir sistemáticamente información
pública al estado para poder estar informado. Tenes la
revocatoria de mandato, es decir mediante la participación
ciudadana revocar un mandato antes del plazo si la ciudadanía
estima que ese funcionario está inclumpliendo con el mandato
que le fue otorgado. Que más, tenés banco de datos sobre
funcionarios y jueces para saber quien es quien dentro de cada
espacio. Bueno, luego está el presupuesto participativo donde
los ciudadanos participan en la definición y aplicación de
partidas presupuestarias. Hay muchísimas herramientas para
poder participar en democracia pero no las utiliza el
ciudadano.
¿No hay conciencia en el
ciudadano?
CM: Si, además yo creo que hay dos cosas. Uno es una especie
de desidia de los ciudadanos que les cuesta mucho participar,
pero por otro lado hay todo un aparato estatal que debería
ser el gran constructor de ciudadanía que es gran fomentador
de ignorancia cívica, entonces una ley de acceso a la
información publica como la de la Ciudad de Buenos Aires no
está difundida, no está en cada ventanilla de atención al público
puesta para que el ciudadano pida información y saber como la
tiene que pedir; ahí la responsabilidad no es del ciudadano,
es la demagogia legislativa que sacan leyes para que después
no se difundan.
Un poco la tarea por ahí no de las
ONG’s está en esa parte intermedia de la falta de
contacto entre el gobierno y los ciudadanos, ¿no
cumplen un poco el rol de la información?
CM: Sí, en realidad lo que trata de hacer la ONG es en tratar
que el estado difunda porque el estado no puede ser
reemplazado por las ONG’S...
No, pero en esa parte intermedia por
ahí faltan canales de comunicación...
CM: Si, yo creo que cumplen un rol intermediario y deberían
cumplir todavía un rol más de presión sobre el estado para
que el estado funcione como debería funcionar, crear un campo
de fuerza alrededor del estado para obligar al estado a que
trabaje en sentido de bien público y no sean puestos todos
esos recursos públicos al servicio de intereses personales o
sectoriales, como sucede con la mayoría de las instituciones
de la democracia.
¿Cree qué este modelo
neoliberal alienta a la participación ciudadana, en la
resolución de los problemas estructurales o simplemente trata
de paliar algunas de las consecuencias por su aplicación?
CM: A mi me parece que más allá del modelo neoliberal también
hay un problema de dirigencia local. Dirigencia política
local, dirigencia empresaria local y dirigencia sindical
local. Yo creo que en la Argentina a nivel nacional y sobre
todo a nivel provincial, no se fomenta la participación, se
desactiva la participación, así que digamos yo no creo que
tenga tanto que ver con una lógica economicista, tiene que
ver con una lógica de concentración de poder que va mucho más
allá que la economía y de desactivar al estado como un
instrumento regulador de la riqueza y de control de
funcionamiento de los otros sectores, en pos del beneficio de
un sector mínimo de la sociedad. Así que para mi es mucho más
complejo, creo que hay motivaciones cruzadas...
No algo por ejemplo parecido, lo que
pasa en la Argentina con los demás países
Latinoamericanos...
CM: Con los países subdesarrollados...
Los que tienen el mismo modelo...
CM: Sí, es un problema de generación de contexto y de falta
de contexto y de falta de institucionalidad y de falta de
normas. Hay una encuesta que se hizo en la década del
60’ en empresas de Inglaterra, de Aseguradoras de
Inglaterra en donde las empresas quisieron medir la honestidad
de sus empleados. El resultado fue que el 25% era
absolutamente honesto, el 25% era absolutamente corrupto y el
50% dependían del contexto. Entonces la falta en la mayoría
de los países latinoamericanos es esa falta de contexto,
digamos que si no hay una justicia que investigue y sanciones,
si no hay instituciones fuertes, sin marcos normativos que se
cumplan evidentemente no tenés contexto. Entonces, obviamente
que la mayoría de la sociedad si sus dirigentes se vuelcan
hacia la violación de normas, vas a tener como resultado una
sociedad inclinada a la corrupción. En la medida que se
empieza a generar contexto y los dirigentes y los líderes
cumplan la ley, va a haber una sociedad inclinada hacia el
respeto, al cumplimiento de las normas. La casualidad
permanente es que la mayoría de los países subdesarrollados
de acuerdo al índice de percepción de corrupción, que es
una de las de mejor conocimiento internacional, están
midiendo muy por debajo de los standares aceptables de
corrupción, digamos los países más permeables a la corrupción
son los países menos desarrollados. Los países más
desarrollados, con estados más fuertes, son los menos
vulnerables a la corrupción.
¿Y en este modelo quien tiene
más poder de cambio? un poco ya lo dijo, los ciudadanos con
su poder de voto o las corporaciones económicas con su poder
de lobby?
CM: Yo creo que claramente los grandes definidores del
contexto son las empresas, digamos General Motors tiene 3
veces el presupuesto de Paraguay. Que puede hacer el
presidente de Paraguay frente al Presidente de General Motors?,
nada. Entonces a mi me parece que creer que el ciudadano
define una elección o toma decisiones en una elección, es
una visión para mi muy simplista de lo que es la democracia y
sobre todo en sistemas como el Argentino, donde los partidos
políticos son totalmente capturados por redes de funcionarios
impresentables, entonces la verdad que acá todo indica que el
sector empresario es quien define el contexto, habrá que ver
si una sociedad movilizada de ciudadanos involucrados en la
democracia más allá del voto, empiezan a poner al Estado al
servicio del bien común y se empieza a equiparar un poco el
poder que tienen hoy las empresas que ni siquiera ya son
locales. Son empresas básicamente multinacionales. Entonces
me parece que ahí hay un interesante desafío para discutir
realmente el rol de los estados, es decir qué rol tienen que
cumplir los estados en un mundo en donde el poder económico
está cada vez más concentrado en pequeños grupos económicos
que superan el producto bruto interno de los países.
¿Y qué reformas del estado de
las principales cree necesarias, más que nada para aumentar
la participación política?
CM:Yo creo que hay dos cosas, hay que crear nuevos espacios y
hay que generar nuevos liderazgos, me parece que reformar el
estado y mantener los dirigentes que hay hoy es lo mismo que
nada. Si tenés un juez corrupto y le reformas el juzgado y le
pones computadoras y demás, lo único que va a hacer es que
va a robar más rápido y mucho más prolijo. Entonces me
parece que hay que conjugar dos aspectos: el cómo vas
regenerando los espacios y como vas encontrando nuevos lideres
y me parece que ahí el punto importante es trabajar
fuertemente en la reforma de los partidos políticos. A a mi
me parece que plantear la reforma política de la lista sabana
es una discusión perversa y que engaña a la sociedad.
y a los medios...
CM: Eso es, exactamente. Entonces el problema es que la oferta
electoral de los partidos políticos sea una oferta electoral
decente, honesta, capacitada. En la medida que de los partidos
políticos sigan brotando los Corach y Nosiglia, mediante
cualquier sistema, listas sábanas, binominal, plurinominal,
van a seguir votando Nosiglia y Corach. Entonces, el trabajo
fuerte que hay que hacer es primero el restablecimiento del
espacio de poder, del partido político, como el gran espacio
donde se deben discutir ideologías, donde se debe dar un
marco de previsibilidad a la dirigencia y a la sociedad,
entonces, eso es un punto. En el funcionamiento del estado,
por supuesto, hay que generar reformas estructurales pero dudo
mucho que la dirigencia actual este dispuesta a cambiar, desde
concursar cargos públicos para terminar con el financiamiento
espurio de la política a través de los recursos del estado,
a crear mecanismos transparentes, a acceder a la información,
etc. Y por otro lado tenemos también el tema de restablecer
los organismos de control para que el sector privado actúe en
un marco de reglas de juego donde la interrelación con el
estado sea la de promover negocios y no negociados.
¿Y qué opina con el
presupuesto participativo que implementaba la Ciudad de Buenos
Aires están de acuerdo, alienta a la participación o lo ven,
por ahí, muy vertical?
CM: No, nosotros lo que creemos es que, pese a las criticas
que se le pueden hacer, es una iniciativa interesante, faltan
cosas, por ejemplo una ley que convierta al presupuesto en una
herramienta de política de estado y no de política de
gobierno, porque mañana se va Ibarra o se le ocurre a
Ibarra dejar de hacer el presupuesto participativo y el
ciudadano no tiene ningún marco legal para poder defender esa
herramienta. La herramienta que se ha implementado acá es un
presupuesto participativo muy incipiente, en donde se han
discutido pequeños porcentajes del presupuesto, ni
siquiera números exactos, sino que se han discutido
lineamientos y prioridades adonde aplicar algunos recursos del
estado. A nosotros nos parece que el presupuesto participativo
tiene, con todas las limitaciones, tres cosas importantes:
obliga al estado a brindar la información de manera que la
gente lo entienda. Es decir, hoy si se le pide a cualquier
localidad o provincia, ni que hablar a nivel nacional, el
presupuesto y lo ponen acá arriba de la mesa, no vas a
entender nada, porque está preparado para que la gente no lo
entienda. Entonces como primera medida interesante el
presupuesto participativo obliga al estado a entregar la
información presupuestaria de manera detallada y entendible
para el ciudadano.
El segundo aspecto es que involucra al ciudadano en la
definición de la aplicación presupuestaria, de las
prioridades, es decir, a un proyecto del gobierno que es
destinar 100mil pesos a blanquear los frentes de los
hospitales, tal vez los ciudadanos digan no, no blanqueemos
los frentes de los hospitales y construyamos cinco salas de
primeros auxilios,en lugares donde la gente se muere porque
nunca llega al hospital. Entonces, al involucrar al ciudadano
en la definición de las prioridades presupuestarias lo
involucras en la discusión presupuestaria y esto es
fundamental sobre todo en una crisis como en la Argentina en
donde cada vez más la calidad de vida de determinados
sectores de la sociedad depende de que haya presupuesto público
para atender su calidad de vida. Y después el tercer aspecto
interesante que tiene el presupuesto participativo es que la
gente al entender el presupuesto y al participar en la discusión
presupuestaria tiene mucha más facilidad para controlar la
aplicación de ese presupuesto. Entonces si la gente definió
que determinada partida tiene que ir a tal lugar y después
va, controla y no lo ve, evidentemente no están cumpliendo.
Entonces me parece que hay tres aspectos importantes ahí que
empiezan a vincular al ciudadano con el presupuesto, que
define su calidad de vida, y que, por lo general, es la ley más
alejada de los ciudadanos. A nadie se le ocurriría ir a
discutir temas presupuestarios si es que no hay todo un
sistema como es el sistema de presupuesto participativo armado
para facilitarle a la gente la discusión.
¿Qué relación o compromiso
mantienen con los llamados nuevos movimientos sociales,
justamente a partir de la crisis de De La Rua, como lo eran
por ejemplo las asambleas barriales?
CM: Bueno, nosotros hemos, creo yo, sido unas de las pocas
organizaciones no gubernamentales tradicionales, es decir
preexistentes a la crisis, que intentó acercarse a los nuevos
espacios surgidos a partir de la crisis como las asambleas
vecinales, grupos piqueteros, empresas recuperadas; y con
aquellos grupos que hemos podido interactuar tenemos trato
directo e incluso estamos trabajando codo a codo con la
asamblea vecinal de San Isidro, con el Movimiento de
Trabajadores Desocupados de La Matanza, con el Movimiento de
Empresas Recuperadas, Poder Ciudadano es una institución por
suerte que se ha abierto a interactuar con estos nuevos
espacios surgidos a partir de la crisis, por este concepto que
sentimos nosotros que se da hoy en este contexto Argentino de
crisis, es decir, no hay inclusión social si antes no hay
inclusión cívica. Si no capacitas al ciudadano para que le
exija al estado políticas de inclusión, está claro que el
estado no los va a incluir; o los va a incluir a través de
planes asistenciales donde la degradación familiar y la
degradación personal es muy fuerte, pues se está generando
una cultura de asistencialismo en lugar de una cultura de
trabajo, no se esta generando una cultura de inclusión, sino
de supervivencia, entonces...
Sobre las asambleas barriales,
¿cuál es la opinión que tiene, porque al principio
empezaron siendo muy masivas, pero con el tiempo se quedaron
mas con las necesidades del barrio, no?
CM: Bueno, la experiencia nuestra es que en todo espacio de
participación siempre hay una decantación, en definitiva las
masas criticas que operan en la democracia, sea a través de
partidos políticos, sean a través de asambleas, sean a través
de organizaciones no gubernamentales, etc. siempre son masas
criticas muy reducidas. Pero yo creo que aquellas asambleas
vecinales que se han consolidado como un espacio de
participación han logrado salir de la deliberación y han
pasado a la acción concreta, en el plano barrial o local
Fui un año un poco por la facultad, y lo que fui viendo
es eso, no? y mucha incidencia también de partidos de
izquierda, como que estaban muy poco capacitados y además que
faltaba una generación, como que se notó, no?
CM Y bueno..si, evidentemente falta una generación.
Se notó mucho, eran como los abuelos
y los nietos digamos.
CM: Si, yo creo que fue desde el punto de vista que lo
planteas vos, una especie de análisis sociológico, es
interesante el movimiento de las asambleas vecinales pero a mi
me parece que las que han perdurado en el tiempo se han
refinado en su participación, han logrado pasar del diagnóstico
a la acción y se han consolidado como espacios de participación.
A mi no me parece mal que estén interactuando en un espacio
militantes de partidos políticos y gente que está en
organizaciones no gubernamentales o gente que está desapegada
de otro tipo de participación más institucionalizada, a mi
me parece positivo.
¿Qué considera que ha sido
una frustración para Poder Ciudadano?
CM: Lo que pasa es que...
¿O para si mismo?...
CM: Si, si vos miras a Poder Ciudadano desde un punto de vista
resultadista, Poder Ciudadano es la historia de una frustración,
porque todos los temas que se planteó Poder Ciudadano en el año
89’ cuando fue creada, todos los temas que se planteaban
a mejorar, han sido todos los temas que han empeorado:
corrupción, representatividad política y justicia. Si lo mirás
desde el punto de vista de un proceso, que los cambios
devienen a partir de procesos, yo creo que Poder Ciudadano es
la historia de un éxito. Poder Ciudadano ha sido protagonista
de algunos cambios, de impulsar solo o conjuntamente algunos
procesos que terminaron instalando políticas públicas. Por
supuesto que la capacidad que vos tenés de acción en una ONG
es muy limitada en comparación a lo que se puede hacer desde
el estado, por eso básicamente el foco de Poder Ciudadano es
que el estado funcione como tiene que funcionar. Creo que una
frustración puntual fue no haber podido lograr la presión
necesaria para que Barrionuevo fuera expulsado del Senado y más
allá de la figura de Barrionuevo, a lo que se apuntaba en si,
era realmente a promover en una institución tan vapuleada
como el Senado, una señal de cambio muy fuerte.
Lamentablemente, y este es un ejemplo que a mi me parece
paradigmático por lo que explica, porque explica el problema
de la corrupción y el problema de la política en Argentina,
que no es un problema de una persona. En el caso Barrionuevo
se ve claramente. Vos podés tener un senado con Barrionuevo,
un senado sin Barrionuevo o un senado con 27 tipos que
defienden a Barrionuevo y en la Argentina tenemos el peor de
los escenarios. Lo que quedó demostrado con el caso
Barrionuevo es que hay una red de políticos que defienden a
personas como Barrionuevo, entonces el problema ya no es como
sacar a Barrionuevo, sino como sacas a la red que protege a
Barrionuevo, entonces desde ese punto de vista el tema del
caso Barrionuevo es muy ilustrativo. Desde el punto de vista
del resultado concreto realmente puede ser considerado una
frustración para la sociedad civil no haber logrado la
expulsión de Barrionuevo del Senado.
Una asignatura pendiente es la Ley de Acción e Información Pública
a Nivel Nacional. Hace dos años y medio que un grupo de
20 organizaciones venimos empujando el tema de la ley de Acción
e Información Pública y apenas logramos que tenga media
sanción en el Congreso.
Bueno, una frustración, digamos, si se quiere en términos
generales es no poder mejorar la calificación y la imagen que
se tiene de Argentina como un país altamente corrupto. Y, tal
vez, la mayor frustración sea no haber podido establecer
lazos de trabajo con los partidos políticos, las
instituciones más cerradas a los cambios son los partidos políticos.
Ha sido imposible interactuar en media acción conjunta entre
Poder Ciudadano y cualquier partido político, incluso con
aquellos partidos políticos...
¿Con ninguno o con los
mayoritarios?
CM: Incluso con aquellos partidos políticos que se muestran
como el oxígeno de la política
Si, no cree que ahí hay que ponerse
a discutir un poco, el tema de reforma política es muy
complicado...
CM: Si, es muy amplio, complicado. A mi me parece que,
flexibilizar las posibilidades para la creación de nuevos
partidos políticos es un gran error porque es seguir
fragmentando el arco, el espectro y seguir consolidando el
poder monopólico del único partido que logra evidentemente
construcción de poder territorial, porque el resto de los
partidos logran una construcción de poder mediático y ya
vemos lo que sucede. Entonces es complicado el abordaje a los
partidos políticos.
Están todos re cerquita hasta el final porque es como que no
hay distintas ideologías,yo veo como que hay mucho de lo
mismo, centro de la derecha, centro izquierda, pero al centro.
El problema es que incluso quienes estaban en los extremos
también se tocan allá. En la recepción tenemos enmarcada
una especie de acta firmada en la ciudad de Córdoba por los
15 candidatos a intendente de la última elección que terminó
ganando Luis Juez y si vos ves quienes no firmaron, de los 15
hay 3 que no firman, uno es la UCD y otro es Izquierda Unida.
Los extremos ideológicos son los que no firmaron, entonces acá
hay un gran problema que es como generas un contexto para
hacer política y dentro de ese contexto discutimos todos las
ideologías que puedan haber, pero lo que no tenés hoy son
reglas de juego, no tenés contexto. Por eso para mi en la
legislatura de la ciudad de Buenos Aires en donde van a entrar
algunas personas que no vienen de la política tradicional y
que han entrado algunos por Macri, otros por Bonasso y otros
por Ibarra, etc. Esa gente nueva, me parece que podría estar
coincidiendo en la construcción del marco y después se
pueden matar ideológicamente porque seguramente el que entró
por Macri no va a tener nada que ver ideológicamente por
quien entró por Bonasso, pero sí tiene que empezar a
definirse reglas de juego en donde se enmarque esa discusión,
porque sino lo que sucede es lo que tenes hoy, hoy no tenés
marco de discusión. Entonces pasa lo que pasa, o se concentra
todo por el centro o pasa todo por afuera.
Claro, desde afuera. Y optimismo para
este futuro
CM: Que se yo, el optimista es un pesimista mal informado, así
que digamos creo que depende de la expectativa de creer. El
optimismo va muy relacionado a la expectativa que vos tengas y
la expectativa que nosotros tenemos desde Poder Ciudadano es
apostar a procesos y sabemos que esto es una construcción a
largo plazo. Si hace 20 años le entregamos la
democracia a esta clase dirigente no esperemos que la
devuelvan en un año. Asi que va a ser un trabajo, por
eso apostamos a procesos, así que si, desde el punto de vista
de esta mirada de procesos somos totalmente optimistas y cada
vez estamos buscando la forma de cómo innovar y como
rediscutir los aspectos estratégicos de la fundación. Por
ejemplo ahora nos estamos planteando desde el año que
viene y por cuatro años trabajar fuertemente el
interior del país. Si a nivel nacional falta mucho, en las
provincias tenés feudos prácticamente, entonces es muy
dificil.
Soy del interior así que...
CM: Bueno, entonces sabés que todo se encuentra muy
concentrado acá.
Para qie las ONG’S de incidencia que están en el
interior no sean neutralizadas por el poder local, se empieza
a generar una red federal por la democracia donde se incluyan
a muchas organizaciones provinciales y locales. Pero que no
termine siendo una red de Poder Ciudadano, sino una red
horizontal donde todas las organizaciones puedan interactuar.
De interactuar ONG’S provinciales locales y nacionales.
A mi me parece que empezas a generarle un valor agregado a la
ONG local muy importante. Le empezas a meter capacidad de
nacionalizar conflictos.
¿Y además piensan en tener
lazos hacia otros países?
CM: Bueno, nosotros somos miembros de cuatro redes
internacionales y de hecho hemos traído la Secretaría
Ejecutiva de la Red Interamericana para la Democracia, que es
una especie, salvando las distancias, de la OEA de la sociedad
civil. Desde Canadá hasta Argentina hay 250 ONG’S de la
región, que integran esta red. Durante el 2003 al 2005 la
secretaría ejecutiva que es el motor de esa red va estar
funcionando en la Argentina a partir de un proyecto conjunto
que presentamos con Asociación Conciencia. Nosotros vamos a
estar manejando la Secretaría Ejecutiva de esta organización,
por lo tanto nuestro compromiso con el mundo, digamos, y
nuestra inserción en la región y a través de Transparencia
Internacional en el mundo, es muy fuerte, recibimos muchísima
información y buenas prácticas de afuera que tratamos de
replicarlas aquí y por otro lado tenemos alta presencia en
distintos países exportando, entre comillas, lo que hacemos a
nivel nacional, provincial y local. Así que yo te diría que
hay tres patas de Poder Ciudadano para el próximo año
en cuanto a su funcionamiento. Una es manejar las acciones que
tradicionalmente viene haciendo Poder Ciudadano, la segunda
pata es trabajar fuertemente en la construcción de esta red
federal para trabajar en el plano nacional y la tercera es
trabajar fuerte en las redes sobre todo Transparencia
Internacional y La Red Interamericana para la Democracia. Así
serían las tres líneas de acción del año que viene
para la Fundación.
Bueno, muchísimas gracias!...
CM: No!... Gracias vos!...
|