El robo de todos los días

01 de Febrero de 2007

Delincuentes escapaban de un robo e ingresaron a una vivienda de San Isidro. Allí se pelearon con dos adolescentes, a quienes atacaron con una katana. "Pensé que me los habían matado", relató su padre.
Todo se inició cuando tres delincuentes escapaban luego de robar en una casa vecina. En un momento ingresaron en una casa donde se encontraban los dos hijos de un matrimonio.
Según relató el padre de los jóvenes, estos se trenzaron en lucha con los delincuentes. En la pelea, los ladrones lograron sustraerles una espada samurai y les provocaron heridas en todo el cuerpo.
“Al llegar vi a mi hijo mayor tirado en la vereda y con sangre esparcida por todo su cuerpo. Pensé que me lo habían matado”, expresó indignado el padre.
Siempre siguiendo el testimonio del padre, los menores habían cometido otro asalto la noche anterior, pero una jueza de San Isidro los dejó libres porque serían menores.
“Espero que no vuelvan a quedar en libertad. Quisiera creer que no va a pasar”, expresó el papá de las víctimas a la prensa, y reveló que sus hijos se encuentran fuera de peligro en el hospital de San Isidro, pese a las múltiples heridas.

Agencia Telam