30 de Septiembre de 2008
Bergoglio cuestionó la realidad social y
habló de los que "caben y los que sobran"
El cardenal Jorge Bergoglio
trazó hoy un duro diagnóstico social y alertó sobre una
"industria del descarte que se llama esclavitud", que
todavía no se abolió
"Hablamos de
opresores y oprimidos, pero no nos basta. Luego añadimos
incluidos y excluidos, y no nos basta. Hoy tenemos que
añadir otro matiz, gráfico y duro, los que caben y los que
sobran", sentenció el primado argentino.
Bergoglio aseguró que los que sobran son, "de alguna manera,
los que dan la materia prima para la industria del descarte,
esa industria que se llama esclavitud".
"Tenemos esclavos. La esclavitud de los niños, sobre todo
migrantes, sometidos a la realización de los cartoneros,
sometidos a la mafia de la droga como mulitas, sometidos a
la mafia de los arrebatadores, sometidos en los talleres
clandestinos que pululan en nuestra ciudad, sometidos a la
cadena de prostitución, porque por más denuncias que se
hagan nadie se atreve a enfrentar", aseveró.
Bergoglio cerró así la Jornada
Arquidiocesana de Pastoral Social, que se desarrolló en el
colegio San Cayetano, del barrio porteño de Liniers,
orientadas a reflexionar sobre los 25 años de la
recuperación de la democracia y la preparación del
Bicentenario.
El purpurado reunió en el acto de clausura al senador
Antonio Cafiero, al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri,
y a sus antecesores Jorge Telerman y Enrique Olivera, pero
fundamentó su reflexión en una carta enviada por el ex
presidente Raúl Alfonsín, que reconoció "me llegó al
corazón".
En esa misiva, leída ante un auditorio de medio millar de
personas que aplaudió por largos minutos, Alfonsín valoró
que "una generación haya nacido en una libertad antes
desconocida", pero alertó que "nuestro compromiso con la
democracia no debe olvidar que millones de argentinos viven
sin trabajo y en la indigencia".
Bergoglio insistió en que es "un
cuento chino" que se abolió la esclavitud en el país, y
exhortó a los dirigentes políticos y sociales presentes en
el auditorio a considerar "la realidad entera y no
distorsionada, en la que aparezcan los que caben y los que
sobran" para hacer un diagnóstico de la realidad