Una gran injusticia con mi papá

Acaba de fallecer mi padre, un hombre bueno que lo único que supo hacer en su vida fue trabajar para que sus hijas pudieran estudiar y salir adelante.

Su cuerpo colapsó porque se entregó.

Hace tiempo que vivía conmigo porque el sistema le robó lo que se ganó desde los 15 años. Estuvo infructuosamente esperando, reclamando por todos los medios la dignidad de tener su jubilación.

Siempre se ganó la vida, quiso ganarse la vejez y el sistema burocrático y mezquino se la tragó. Mandó cartas a Presidencia, le respondieron que se ocuparían personalmente de su caso. Evidentemente se equivocó de fecha para pedir ayuda: no era época electoral y el voto de un viejo no le hace falta a nadie.

Gracias a Dios, pude darle todo lo que necesitó y sus últimos años fueron excelentes, pero a él siempre le quedó la daga clavada de que lo mantuvieran.

Maldito sistema que se come dignidades, derechos y vidas.

Ojalá cambie y se fijen en la gente honesta que toda su vida aportó y no sólo en los que convienen políticamente.

Mi papá se llamaba José Montero , y lo vamos a extrañar, pero estamos en paz porque le dimos todo.

Uds. señores del ANSES, señores políticos, señora presidenta, cargan con un muerto más en la conciencia.

Y deben ser unos cuantos ya.

Reproducción textual de la carta al pais al Diario Clarín, publicada el 29.11.2008 y autorizada por su autora a ser reproducida también por este medio on line.

NOTA DE LA REDACCION:Asimismo añadimos, textualmente también  y con autorización de la autora, que se le agregan las dos líneas fundamentales excluidas por el diario Clarín en su "autocensura" a quien no por ello dejamos de agradecer pues le damos la posibilidad de la duda, aunque también los empresarios, sindicalistas, etc, ha formado esta clase gobernante "genocida", Clarín colabora simplemente con el viejo "no te metas de la sociedad toda".

Marcela Montero
marcelaamontero@hotmail.com