LOS  “KIRCHNER” SIGUEN
ECHANDO PERIODISTAS..
SIN AIRE: “NELSON CASTRO”

02 de Febrero de 2009

Cambios en Radio del Plata: Dejaron sin aire a Nelson Castro

Pese a que el contrato vencía a fines del 2009, los nuevos dueños de la emisora, afines al kirchnerismo, decidieron la desvinculación del periodista.
 


El conductor debía volver el próximo lunes al aire de Del Plata con su programa Puntos de vista.

El periodista Nelson Castro no se podrá reencontrar con sus oyentes este lunes, cuando finalice sus vacaciones. Las nuevas autoridades de Radio del Plata, afines al kirchnerismo, lo dejaron sin micrófono.

Hace dos semanas, Castro se despidió de su audiencia con el presentimiento de que no volvería a conducir el programa Puntos de vista, que estaba en el aire desde 2006 en la emisora. Antes de irse, había recibido el mensaje velado de que sus críticas hacia el Gobierno no eran bienvenidas.

Mientras anoche regresaba de su descanso, los abogados de Castro ultimaban con los ejecutivos de Del Plata diferentes fórmulas para la desvinculación ya que, originalmente, el contrato entre las partes vencía a fin de año.

“A partir del lunes, el programa no va a estar más. Se decidió la rescisión del contrato con una compensación económica adecuada para Castro”, explicó el vocero de Electroingeniería, Carlos Bergoglio.

Las nuevas autoridades de Del Plata, ligadas al mundo K, habrían llamado la atención del conductor por una entrevista de la primera semana de enero al diputado de la Coalición Cívica Juan Carlos Morán, en la que el legislador denunció presuntos sobreprecios en una obra de la que participaba indirectamente Electroingeniería, nueva propietaria de la emisora junto con el empresario mediático Sergio Szpolski. Critica de la Argentina

 

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Desvincularon ayer a Nelson Castro de radio kirchnerista

Al regreso de sus vacaciones, el periodista y conductor de “Puntos de Vista” se quedó sin aire. Las autoridades de Radio del Plata le rescindieron el contrato que finalizaba en diciembre de 2009. “A partir del lunes el programa no va a estar más. Respecto de las motivaciones, no tenemos nada para decir”, le dijo a este diario el vocero de la empresa, Carlos Bergoglio.


Sin regreso. El columnista de PERFIL se despidió de sus oyentes el 16 de enero. Los nuevos dueños ya estaban a cargo.

Nelson Castro no se podrá reencontrar con sus oyentes este lunes. Las nuevas autoridades de Radio del Plata, afines al kirchnerismo, lo dejaron sin micrófono.

Hace dos semanas, el periodista y columnista dominical de PERFIL partió de vacaciones con el presentimiento de que no volvería a conducir el programa Puntos de vista, que estaba en el aire del 1030 desde 2006. Antes de irse, había recibido el mensaje velado de que sus críticas hacia el Gobierno no eran bienvenidas en la emisora.

La sospecha de Castro se convirtió en certeza en su ausencia. Mientras anoche regresaba de su descanso, los abogados de Nelson ultimaban con los ejecutivos de Del Plata diferentes fórmulas para la desvinculación ya que, originalmente, el contrato entre las partes vencía a fin de año.

“A partir del lunes, el programa no va a estar más. Se decidió la rescisión del contrato con una compensación económica adecuada para Castro”, explicó a este diario el vocero de Electroingeniería, Carlos Bergoglio. “¿Por qué se tomó la decisión?”, quiso saber PERFIL. El vocero respondió: “Sobre las motivaciones no tenemos nada para decir”.

El convenio de rescisión del contrato estaba, al cierre de esta edición, todavía sin firmar. Pero es una certeza que Nelson Castro no volverá a tomar contacto con la audiencia de Del Plata. Su último día, tal como anticipó PERFIL, fue el 16 de enero. Durante estas dos semanas lo reemplazó su bastonero, Mario Portugal, y desde el lunes, el horario de 6 a 9 será ocupado con otro programa.

Final cantado. La gota que rebasó el vaso fue una entrevista que Nelson le hizo en la primera semana de enero al diputado de la Coalición Cívica Juan Carlos Morán, en la que el legislador denunció presuntos sobreprecios en una obra de la que participaba indirectamente Electroingeniería, nueva propietaria de la emisora junto con el empresario mediático Sergio Szpolski.

Aunque Castro entrevistó luego de Morán al vocero de la constructora Carlos Bergoglio, las autoridades de la radio le habrían transmitido al periodista el presunto malestar por la difusión del tema en el programa Puntos de vista.

No era una denuncia sin fundamentos. Un día antes, el matutino La Nación daba a conocer una auditoría de la AGN –organismo de control de la Nación– en la que se deslizaban los presuntos sobreprecios por un 48% en la ejecución del tendido eléctrico Pico Truncado-Río Gallegos, una obra que realiza una empresa contratada por Electroingeniería.

El malestar oficial se profundizó después con el panorama político de Nelson en PERFIL, en el que relató las razones ocultas detrás de la lipotimia de Cristina. También hizo comentarios sobre la salud de la Presidenta en la radio, que no habrían caído nada bien en la Casa Rosada. La segunda semana de enero llegó la primera advertencia: “Tenemos que hablar, nuestros caminos deben diversificarse”. La comunicación fue de un director de la emisora a un productor de Nelson.

Las advertencias habrían recrudecido esta semana. “Vamos a rescindir el contrato con ustedes”, le avisaron al mismo productor desde la conducción de la AM, entre el martes y el miércoles. El clima de convivencia era cada vez peor. Todo desembocó en una negociación para desvincular efectivamente al periodista, con una compensación económica porque el contrato original vencía en diciembre de 2009 y se termina, en cambio, en febrero, once meses antes.

El intento de censura sobre Castro tiene antecedentes. Se quedaron sin aire de medios oficialistas en otras ocasiones Pepe Eliaschev, Jorge Lanata, Alfredo Leuco y Víctor Hugo Morales. La poca tolerancia del kirchnerismo hacia los medios y sus periodistas tuvo como coletazo, en este caso, la salida de un prestigioso periodista, como Castro, de Del Plata. Sus oyentes, ya no se escucharán los comentarios críticos de Nelson.

Szpolski y Ferreyra: la relación de una emisora K

Los comentarios críticos de Nelson Castro hacia el Gobierno habrían originado el malestar de las nuevas autoridades de la radio. Se trata de dos empresas con fuertes influencias kirchneristas: la firma cordobesa Electroingeniería y el grupo Szpolski (Veintitrés, Siete Días, Newsweek, BAE, entre otros medios), que se hicieron cargo del manejo de la emisora a través del desembolso a finales de 2008 de 8 millones de dólares.

La compra de Radio Del Plata, una de las cinco frecuencias más escuchadas en el país, se interpretó como un avance del kirchnerismo sobre los medios de comunicación. Una cuestión que obsesiona al matrimonio presidencial desde que gobernaban la provincia de Santa Cruz, donde el cadete Rudy Igor Ulloa se convirtió en un próspero empresario de medios.

El arribo de las nuevas autoridades de la emisora alimentó una ola de rumores sobre un posible cambio en la línea editorial de la radio. El objetivo: fortalecer al Gobierno en un año electoral. Según trascendidos periodísticos, Sergio Szpolski es el accionista minoritario y se quedó a cargo, sin embargo, de la gerencia comercial de Del Plata.

La avanzada mediática kirchnerista no se detiene. El grupo Szpolski adquirió las radios América (AM) y Aspen (FM) de manos de los mexicanos del CIE. Szpolski también se asoció con los propietarios de Crónica TV. Por Mariano Confalonieri, para Diario Perfil.

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Nelson Castro cuenta todo sobre el levantamiento de su programa en la kirchnerista Radio Del Plata

Sin regreso. El columnista de PERFIL se despidió de sus oyentes el 16 de enero. Los nuevos dueños ya estaban a cargo.
Sin regreso. El columnista de PERFIL se despidió de sus oyentes el 16 de enero. Los nuevos dueños ya estaban a cargo. | Foto: Cedoc

En las ediciones de ayer y de hoy de Perfil, el lector ha encontrado la información inherente a la decisión de Radio Del Plata de levantar del aire mi programa, Puntos de Vista, que se emitía de lunes a viernes en el horario de 6 a 9 de la mañana.
El desarrollo y desenlace de este episodio ha sido fulminante. Es un hecho que cobra una relevancia mayor, que excede a mi persona, debido al contexto dado por la situación de apremio a la libertad de expresión que se viene experimentado en nuestro país a lo largo del gobierno del matrimonio Kirchner.

Los hechos

Entre principios y mediados de noviembre del año pasado, Radio Del Plata fue adquirida por la empresa Electroingeniería. Esto generó inquietud en muchos de los que formamos parte de la grilla de su programación. La relación de cercanía de la empresa con el Gobierno era y es algo bien conocido. Se generó, entonces, una duda: ¿qué pasaría con muchos de los que formábamos parte de esa programación atento a nuestras posturas independientes y, muchas veces, críticas del Gobierno? En nuestro caso estaba, además, la circunstancia de un contrato vigente que expiraba a fines de este año 2009.

En conocimiento de esta inquietud, las autoridades de la empresa, cuya sede está en la provincia de Córdoba en donde Radio Del Plata no tiene repetidora y, por lo tanto, no se escucha por aire, bajaron a Buenos Aires con el objetivo de hacernos saber, personalmente, de su interés para que continuáramos en la emisora. Nos aseguraron, asimismo, el total y absoluto respeto a nuestra libertad.

Allí planteamos, además, un tema: ¿qué actitud tomaría la empresa cuando hubiera una información referida a alguna controversia o denuncia que la involucrara? Allí expusimos, en forma clara y franca, que nuestra norma es la de no eludir los temas que involucran a los propietarios de los medios en los que trabajamos. Así lo hicimos, por ejemplo, cuando hubo una denuncia por una supuesta irregularidad en la emisión de facturas correspondientes a órdenes de publicidad que, en 2007, involucraban a Ideas del Sur, la productora de Marcelo Tinelli. Recuerdo que no tuvimos ningún inconveniente. Marcelo entendió perfectamente que por el hecho de ser él el propietario de la radio, no tenía derecho a que se silenciara un acontecimiento público que aludía a su empresa y que lo que correspondía era dar las respuestas pertinentes.

Bien, lo cierto es que, presentado el tópico ante las autoridades de Electroingeniería no opusieron reparos a la enunciación de nuestra conducta. Esas fueron las palabras. Los hechos habrían de ser bien distintos.

En su edición del domingo 4 de enero pasado, el diario La Nación publicó en su tapa una nota referida a un informe de la Auditoría General de la Nación (AGN) en la que se hablaba de sobreprecios en el costo de las obras de tendidos de redes eléctricas en el sur del país. La empresa aludida en ese informe era –es– Electroingeniería.

Los contratos de obra pública constituyen asuntos de interés público y, mucho más, cuando hay un organismo de control que emite un dictamen crítico sobre ellos. Es bien sabido que la obra pública ha sido y es, fuente de muchos casos de corrupción no sólo en la Argentina sino, también, en el mundo entero.

No había ninguna duda, pues, que este era un tema de interés público y atención sobre al que se abocaría, no sólo nuestro programa en la mañana del lunes 5 de enero. En efecto, pues, así como nosotros, también tuvieron este tema en su agenda el programa de la primera mañana de Radio Mitre que conduce Ernesto Tenembaum y el de Antonio Lage por Radio Blue.

En nuestro caso, la forma cómo se abordó la cuestión fue la de costumbre ante estos hechos: se lo llamó primero al diputado de la Coalición Cívica Juan Carlos Morán, que había hecho la primera denuncia sobre el caso, y luego se lo contactó al vocero de Electroingeniería, ingeniero Carlos Bergoglio, para escuchar su respuesta. Esto es el abc del periodismo. Al respecto, hay que decir que el ingeniero Bergoglio había sido llamado por la producción del programa en la tarde noche del domingo 4 para concertar la entrevista sobre la que el vocero de la empresa no opuso ningún reparo ni objeción.

En honor a la verdad, hay que consignar que las respuestas dadas por Bergoglio a cada uno de los cuestionamientos que se le hicieron fueron sintéticas, entendibles y fundamentadas.

Por sus características, fue una nota más de tantas, sin ninguna repercusión particular.

Fue varios días después que, oficialmente, se nos hizo saber del “profundo desagrado” que la tan mentada nota había producido a las autoridades de la empresa. Aparecía aquí una contradicción ya que, la misma empresa que se avenía a hablar sobre el tema en otros medios, no aceptaba que eso mismo se hiciera en la radio de su propiedad.

A ese desagrado se le sumó el del entorno presidencial que día tras día hacía saber a distintas autoridades de la emisora el disgusto por mis críticas tanto a la Presidenta como a su esposo, el ex presidente en funciones.

El desagrado aquel sumado a este generó una ecuación de resultado letal para nuestra permanencia en la emisora. Por lo tanto, la radio decidió el levantamiento de nuestro programa. Es lo que expresa el documento de rescisión en el que se lee:
“…Que, Del Plata ha decidido retirar del aire y dejar de emitir el programa Puntos de Vista a partir del 2 de febrero de 2009 y, consecuentemente, rescindir el contrato.”

En el medio de todo esto no faltaron las idas y venidas habituales de todos estos hechos siempre desagradables. Hubo quienes desde la radio hicieron trascender que era yo quien me quería ir y que todo esto no era más que una estrategia para conseguir un contrato mejor. Un verdadero disparate que queda desmentido por el texto arriba citado y por la realidad de mi presente laboral: a 2 de febrero y con todo un año por delante me he quedado sin el programa de radio que, con mi equipo, venía haciendo desde hace 16 años.

Es cierto que ha habido una indemnización. Pero a un daño como éste no hay indemnización que lo resarza.

Es una realidad dura que han vivido otros antes que yo durante el gobierno de los Kirchner. En efecto, Víctor Hugo Morales, Pepe Eliaschev, Alfredo Leuco y Jorge Lanata, han pasado por lo que nos toca vivir a mi equipo y a mí en estas horas.

La relación de los Kirchner con los medios que no les demuestran adhesión ha sido siempre mala. Los testimonios provenientes de Santa Cruz son abundantes en este sentido. La realidad de medios que por tener posiciones críticas hacia el entonces gobernador eran víctimas de persecución, retiro de publicidad oficial y hasta de acoso judicial. Todo eso era la norma de aquel panorama desolador para la libertad de prensa.

En este marco, recuerdo una anécdota. Fue en el año 2000. Había viajado en representación de la Asociación Periodistas, lamentablemente disuelta en 2004, a Comodoro Rivadavia. Se hacía allí una reunión de periodistas de la Patagonia y el tema eran las dificultades que los colegas de la región tenían para desarrollar su tarea con libertad. Terminada la conferencia, subí a mi habitación del hotel a esperar el momento de la cena. Fue entonces que escuché que alguien pasaba un sobre debajo de la puerta.

Al recogerlo y abrirlo, me encontré con un mensaje firmado por tres periodistas de Santa Cruz que pedían reserva sobre sus nombres. En el mensaje solicitaban que la Asociación enviara algún observador a la provincia para tomar conocimiento de las dificultades que tenían para desempeñar sus tareas los periodistas y los medios que no se resignaban a la confiscación de su independencia. Sé que Marcelo Zlotogwiazda vivió una experiencia similar a ésta.

Esa realidad de la provincia de Santa Cruz se viene expandiendo a nivel nacional.

Ya en la misma Radio Del Plata, cuando era propiedad de Marcelo Tinelli allá por el año 2006, el Gobierno puso trabas al decreto de concesión de la emisora debido al disgusto que le producía que allí trabajáramos Jorge Lanata y yo. Fue un momento muy difícil en el que, debo decir, Marcelo nos respaldó, defendiendo nuestra libertad contra viento y marea.

Qué decir del intento del ahogo financiero a Perfil, no sólo con la restricción de la publicidad oficial sino también con el acoso a aquellas empresas privadas que querían anunciar en el diario, lo que motivó aquel famoso fideicomiso que originaron los lectores.

Esta es la realidad que vivimos hoy en día. Es una realidad que no es exclusiva de los Kirchner. Es, en verdad, una matriz que se replica en el país a todo nivel. La ponen en práctica muchos gobernadores e intendentes de distintas regiones y de distinto color político.

En el caso del Gobierno el proyecto es claro. Aquí están empresas que tienen negocios con el Gobierno, que compran medios y que, además, reciben publicidad oficial a carradas. En esos medios la idea es que no se hable de ningún aspecto controversial que circunde a los contratos por obra pública que hacen esas empresas. Tampoco agrada que se sea muy crítico del matrimonio presidencial. Ese es el mensaje que conlleva el levantamiento de nuestro programa Puntos de Vista. Un dato más: Electroingeniería ha hecho saber que piensan comprar más medios. Inquietante.

Se cierne sobre nuestro país un riesgo serio y creciente sobre la libertad de expresión. Por eso es que éstos son temas de fundamental importancia a los que la sociedad debe atender. Ya no es sólo por la situación laboral de cada uno de los que somos sucesivamente afectados.

Esto va más allá. Tiene que ver con la esencia misma de la democracia que es la pluralidad. Porque el periodismo libre es un instrumento fundamental para hacer a la sociedad más democrática y honesta. Nelson Castro, en su columna en el diario Perfil.


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La censura kirchnerista

Nelson Castro: "Veo la mano del gobierno detrás de mi salida"

"Vivo esta salida de Radio Del Plata con una enorme preocupación hacia el presente y el futuro, porque esto va más allá de mí. Tiene que ver con las acechanzas que la libertad de expresión tiene hoy en la Argentina." Así habló ayer Nelson Castro, en la primera entrevista que concedió tras el levantamiento de Puntos de vista , y su desvinculación formal de Radio Del Plata, comprada a fin de año por Electroingeniería, de fuertes lazos con el kirchnerismo.

En diálogo con LA NACION, Castro dijo que se sentía espiritualmente tranquilo y seguro en sus convicciones, "pero con pena porque este ciclo estuvo 16 años en el aire. Primero en La Red y luego en Del Plata".

Confirmó que, en el acuerdo firmado se establece "que Radio Del Plata decidió retirar del aire y dejar de emitir el programa Puntos de vista a partir del lunes 2 de febrero". Al periodista le quedaban once meses de contrato por delante. La noticia de que Puntos de vista no continuará generó amplias repercusiones entre lectores de LA NACION online , que volcaron más de 600 comentarios. Fue una de las noticias más leídas ayer.

"Lo importante es que los perjudicados no somos sólo los periodistas, sino la sociedad en su conjunto. La audiencia tiene que saber qué está pasando en los medios, porque eso nos afecta a todos. La sociedad pierde un instrumento fundamental en favor de la decencia", sostuvo Castro.

-¿Cuál es el daño a la opinión pública a partir de lo ocurrido?

-Se deteriora la república, aunque la democracia esté consolidada. Porque la calidad del periodismo también hace a la república. Creo que hace falta una ley de radiodifusión que sea restrictiva respecto de quiénes acceden a la propiedad de los medios.
No puede ser que haya empresas que sólo favorezcan al poderoso de turno o a sus propios intereses. Nosotros tenemos constancias de la disconformidad del entorno presidencial por las opiniones vertidas en Puntos de vista . Y eso le confiere a la decisión de la radio otra relevancia.

-¿Cómo se presenta el futuro?

-Obviamente es una situación difícil, pero va más allá de mí. Aquí hay una empresa, Electroingeniería, a la que se le adjudican obras públicas, sin experiencia en los medios y que dice que seguirá comprando medios. Esto es lesivo para la libertad de prensa y genera una enorme preocupación. Si esto se extiende a los demás medios, va a ser imposible informar sobre hechos de indiscutido interés público.

-Usted tiene 34 años en el aire, ¿vivió antes algo similar?

-No, es la primera vez.

-¿La forma en que se ha tejido la relación del Gobierno con los medios es la más tensa en los 25 años de democracia?

-Sí. Pero me recuerda mucho a lo que pasó durante el menemismo. No me sorprende, pero hoy las cosas se hacen de manera más brutal.

-¿Esto afecta la calidad del periodismo?

-Obviamente. Cuando hay empresas que no tienen relación con el mundo de los medios y se sostienen en la publicidad oficial, uno sospecha y ve la mano del Gobierno detrás. Eso constituye un verdadero problema en la Argentina. Y nuestra democracia no sabe cómo solucionarlo. Esta metodología no es exclusiva de los Kirchner. Pasa en muchas provincias. En la Argentina está en riesgo la posibilidad de contar con medios que aseguren la libertad de expresión. Hay un concepto autoritario del poder y es un verdadero problema de la democracia.

-¿No acaba siendo exitosa la maniobra oficial de comprar medios o subvencionarlos, si las voces críticas salen del aire?

-Por supuesto, y tendría que ser motivo de debate en la sociedad. A medida que esto avance, será imposible en la Argentina el ejercicio del periodismo libre y con apego a la honestidad, esencia de esta profesión. El Gobierno utiliza al seudoperiodismo para hacer operaciones de prensa, lo que es muy peligroso para la república.

-Cuando Electroingeniería compró la radio ¿se comprometió a mantener Puntos de vista ?

-En diciembre, cuando se produjo el cambio de propiedad de la radio, ofrecimos irnos. Los nuevos dueños pidieron que nos quedáramos. Además, Marcelo Tinelli [anterior dueño de Del Plata) me aseguró que continuaría con la radio. Tinelli se fue cuando las radios ya habían cerrado la nueva temporada. Susana Reinoso, entrevista para el diario La Nación.