05 de Mayo de 2009
Gesto
del embajador argentino para bajar tensiones
"Estamos más enfermos que
ellos"
Yoma dijo que hay más dengue
en la Argentina que gripe porcina en México
CIUDAD DE MEXICO.-
Está claro que la frase del
embajador Jorge Yoma
fue un
fuerte gesto destinado a aliviar el malestar que hay en
México a raíz de la decisión de la Casa Rosada de extender
la suspensión de vuelos entre los dos países:
sostuvo que "la Argentina está más
enferma por el dengue que México por la influenza humana".
La confesión, realizada
en una nutrida conferencia de prensa en la embajada
argentina, tomó por sorpresa a propios y extraños. Yoma fue
más allá: dijo que en la Argentina hay más de 60.000
personas afectadas por el dengue.
El embajador reconoció
implícitamente, además, que la cancillería mexicana presentó
una queja formal por las palabras de la ministra de Salud
argentina, Graciela Ocaña, quien en declaraciones
periodísticas había definido a México como "el hermano
enfermo".
Yoma, que
ayer se reunió con
el subsecretario
para América latina y el Caribe de la diplomacia mexicana y
virtual vicecanciller de este país, Salvador Beltrán del
Río, dijo
que de inmediato le hizo llegar las disculpas que México
exigía. "No me cabe la menor
duda de que Ocaña no quiso ofender a los mexicanos. Pero yo
mismo presenté las disculpas del caso, luego de hablar con
la ministra telefónicamente", dijo Yoma.
Y agregó: "¿Cómo vamos a pensar que México es un hermano
enfermo, si la Argentina está más enferma de dengue que este
país del virus de la influenza humana?".
Yoma, que cuando estalló
la crisis por la gripe porcina estaba en La Rioja en plena
campaña proselitista y sólo llegó a México el viernes
pasado, reconoció que las explicaciones que ayer le dio
verbalmente al subsecretario Beltrán del Río serán volcadas
en una nota oficial que harán llegar a la cancillería
mexicana.
El ex senador
justicialista, que en todo momento intentó bajarle los
decibeles al entredicho diplomático, se mostró preocupado
por lo que entendió como algunas manifestaciones xenófobas
nacidas a partir de la decisión argentina de suspender los
vuelos.
En
Buenos Aires, fuentes oficiales dijeron que esa suspensión
no fue una iniciativa del Ministerio de Salud, sino que se
resolvió "en otro nivel". De hecho, fue la Jefatura de
Gabinete la que le comunicó la medida a Ocaña. Otras fuentes
vinculadas con la decisión confiaron que "fue una orden de
[Néstor]
Kirchner,
que no quería saber nada con la aparición de un brote en
plena campaña electoral".
Ayer, fuentes
diplomáticas dijeron a
LA NACION
en Ciudad de México que
habían comenzado a llegar a la casilla de correo electrónico
de la embajada argentina no pocos mensajes de cierto tono
agresivo. Un sentimiento antiargentino similar se puede
corroborar en los foros y en los mensajes que los lectores
dejan en las páginas online de los principales
diarios mexicanos
"Somos países
hermanos. La Argentina nunca se olvidará de la solidaridad
de los mexicanos que en la década del setenta recibieron a
mis compatriotas con los brazos abiertos, tal como recuerda
la placa que está instalada en el jardín anterior de esa
sede", dijo el embajador.
La idea de la amistad y de
la hermandad se repitió casi en la totalidad de las
respuestas del embajador ante las consultas de la prensa.
Reiteró ayer que la Argentina debe condenar enérgicamente la
posibilidad de que a los equipos mexicanos no se les permita
jugar en este país sus partidos por los octavos de final de
la Copa Libertadores e insistió en que la cancillería
mexicana "entendió perfectamente los argumentos con los que
la Argentina suspendió sus vuelos hacia México".
"Nuestros aeropuertos no
estaban preparados para el control de pasajeros que,
provenientes de cualquier país del mundo, llegaron con algún
síntoma del virus de la influenza humana. No teníamos
escáneres digitales de temperatura corporal. Comprarlos e
instalarlos nos demandó cinco días", dijo.
Varados en Buenos Aires
Cuando se le hizo notar
que la explicación alcanzaba para justificar o entender la
primera cancelación de vuelos, pero no su extensión decidida
anteayer, Yoma sostuvo que ésta estuvo motivada porque aún
no se había terminado de instalar un hospital de campaña
móvil en Ezeiza.
Explicó que, a raíz de la
cancelación de vuelos, un buen número de turistas mexicanos
quedaron varados en Buenos Aires y que, a pedido de la
cancillería mexicana, el gobierno de Cristina Kirchner se
hará cargo de los gastos de alojamiento y de comida de estos
ciudadanos.
No
arriesgó una fecha cierta para la reanudación de los vuelos,
pero en Buenos Aires algunas fuentes reconocieron ayer que,
tras las fuertes críticas de
la ONU,
se estaba analizando un anuncio en este sentido. "Espero que sea lo más
pronto posible", dijo Yoma, pero estimó que la decisión, que
se tomará en Buenos Aires, estará íntimamente relacionada
con la evolución de la epidemia en México.
Reveló que, en una fecha
por coordinar entre los autoridades sanitarias argentinas y
mexicanas, saldrá de Buenos Aires un vuelo especial con
guantes de goma, gel de alcohol, alcohol líquido y barbijos.
En ese avión vendrá también el director nacional de
Epidemiología y Enfermedades Infecciosas del Ministerio de
Salud, acompañado por médicos, técnicos y especialistas del
Instituto Malbrán.
"Esta debe ser tomada como
otra muestra de la amistad entre ambos países", justificó
Yoma. "Los médicos argentinos vendrán aquí para trabajar y
aprender de la invalorable experiencia mexicana. No podemos
olvidar que en el hemisferio se acerca el invierno y, con
ello, seguramente, aumentarán los casos de gripe", concluyó.
Luis Moreiro,
Enviado especial.