20 de Julio de 2009
Los opositores de Moyano
debatirán si van al diálogo
No los seducen los contactos
oficiales y critican la relación de Moyano con el Gobierno
La CGT acelera su ruptura con la
decisión del secretario general, Hugo Moyano, de designar
por su cuenta a los 16 representantes sindicales (los otros
cuatro los nombrará la Central de Trabajadores de la
Argentina, CTA) en el Consejo Económico y Social (CES), que
tendrá una reunión preparatoria con representantes de los
empresarios el martes próximo en el Ministerio de Trabajo.
Pero
los "Gordos" y los "independientes", que integran los
sindicatos de más afiliados de la CGT, se inclinan por no
integrar esa delegación en el CES, y hasta rechazar
cualquier invitación sectorial que les formule
el ministro de Planificación
Federal, Julio De Vido. "Con Moyano no vamos ni a la
esquina", dijo a LA NACION un dirigente opositor. Y se quejó
de Néstor Kirchner: "Rechazamos esta relación individual que
privilegió a Moyano por encima del diálogo que debía tener
toda la CGT con el Gobierno".
Los rebeldes no asistieron
anteayer a la reunión de consejo directivo sindical. Fue la
primera vez que ocurrió desde que el camionero fue reelegido
hace un año en la CGT.
Y pasado
mañana, estos sectores se reunirán en la sede de la Uocra
para refirmar el distanciamiento con Moyano. Allí, el dueño
de casa, Gerardo Martínez, recibirá a Armando Cavalieri
(Comercio), Oscar Lescano (Luz y Fuerza), Carlos West Ocampo
(Sanidad), José Pedraza (Unión Ferroviaria), Andrés
Rodríguez (UPCN) y Carlos Sueiro (Aduanas). También estarán
el duhaldista Gerónimo Venegas (Uatre) y el gastronómico
Luis Barrionuevo.
Analizarán si concurren al Consejo Económico y Social, y si
sus representantes en el Consejo del Salario Mínimo asisten
al encuentro convocado por el Ministerio de Trabajo para el
lunes 27.
Moyano no se queda atrás y lucha junto a los suyos. "Los
sindicalistas suplentes que integran las distintas
comisiones ya tienen orden de concurrir a la cartera laboral
y ocupar los lugares de los titulares que no asistan",
desafió Jorge Viviani (peones de
taxis) a LA NACION.
Es
posible que, como excepción, los "Gordos" e "independientes"
no resignen sus puestos allí.
De Vido
invitó a Lescano a concurrir al CES "sectorialmente" (y lo
mismo haría con el resto de los opositores a Moyano), junto
con los empresarios de cada área. Por caso, en la
problemática de la energía, el comercio y otras cuestiones.
Hasta ahora no hubo una decisión
conjunta de los sindicalistas, y la reunión en la Uocra será
clave. ¿Se negarán estos dirigentes a rehusar el convite
oficial?
Lescano dijo a Radio América:
"Estamos en disidencia con la forma de conducir de Hugo
[Moyano]", y aunque señaló que había que "conversar con él",
no descartó la posibilidad de formar un "triunvirato" o una
"conducción colegiada" en la central sindical.
Otro
sindicalista opositor dijo enojado: "De Vido era el garante
de un trato ecuánime con toda la CGT y no cumplió con esa
promesa". Se quejó de que "Kirchner beneficie a Moyano y
[los] discrimine con las obras sociales", al criticar que
Hugo Sola (ligado a Viviani)
fuera repuesto en la APE, que distribuye fondos de
programas especiales.
El
diálogo sectorial tampoco parece seducir a los disidentes.
"El Consejo [el CES] recibe las opiniones, pero no resuelve
las cuestiones por sectores. Si queremos discutir con los
empresarios, para eso tenemos las paritarias", dijo el
gremialista.
Igualmente, el Gobierno insistirá en sumar a estos
dirigentes porque, según una fuente oficial, "las políticas
de cada sector sí se debaten en el CES".
Para
agudizar las diferencias en la CGT,
el moyanista Omar Plaini
desafió: "Si no quieren venir, que no vengan. Ya quedó claro
quiénes somos los peronistas y quiénes jugaron con
De Narváez y Macri".