05 de Mayo de 2009
En la Red Argentina de Bancos
de Alimentos la demanda es similar a la de 2001; temen que se reduzcan las
donaciones de mercadería de las empresas por la crisis; sólo en el banco de
Buenos Aires hay 200 entidades en lista de espera
![](http://www.lanacion.com.ar/anexos/fotos/22/991922.jpg)
Todo empezó en la antesala del derrumbe de
2001. Un grupo de voluntarios sintieron la necesidad de movilizarse contra el
hambre.
Así nació el primer Banco de Alimentos en la
Argentina, un nexo entre empresas dispuestas a donar mercadería e
instituciones como iglesias, escuelas, comedores comunitarios que asisten a
quienes se acercan por un plato de comida.
En 2001 este modelo -que tiene como
antecedente uno creado en la década del 60 en EE.UU.- creció con fuerza. Tanto
es así que en 2003 debieron ordenarse en una Red
Argentina de Bancos de Alimentos, que hoy agrupa a 14 bancos : Buenos Aires,
Córdoba, Goya y Virasoro (Corrientes), La Plata, dos en Mar del Plata, dos en
Mendoza (capital y Valle de Uco), Salta, Jujuy, Tandil, Tucumán, Mendoza y
Neuquén.
Así, desde entonces esta red no para de
crecer. Durante 2007, distribuyó unos 5 millones de kilos de alimentos entre
1000 instituciones que atienden a 150.000 personas; un año después, sumó un
15% más de alimentos. En el inicio de 2009, según dijo a lanacion.com
la directora ejecutiva de la red, Vanina Ubino,
la demanda tuvo un alza muy importante y puede compararse con los picos de
2001. Las listas de espera, que sólo en el banco de Buenos Aires alcanza las
200 entidades, se incrementa sin demasiadas posibilidades de hacer frente a
nuevos compromisos.
Aumenta la demanda de alimentos
El agravante es que este año se calcula que
la cantidad de donaciones de empresas caerá. "Suponemos que, por la crisis,
van a ajustar sus volúmenes de producción y probablemente caigan las
donaciones", dijo Ubino. Y agregó que también las entidades vinculadas al
agro, tradicionalmente buenas proveedoras de mercaderías, vienen reduciendo
sus entregas desde la pelea con el Gobierno.
El modelo de trabajo, tanto de la red como
de cada uno de los bancos, consiste en recuperar los alimentos que las
empresas no pueden comercializar, ya sea por problemas en el packaging o
porque se encuentran próximos a su fecha de vencimiento comercial, pero que
están en perfectas condiciones para su consumo. A su vez cada banco cuenta con
depósitos donde almacena los productos donados y que luego son distribuidos
entre las entidades asociadas.
En el Banco de Buenos Aires que visitó
lanacion.com, en Villa Zagala, Partido de San Martín, unos 200 voluntarios por
mes se encargan de la clasificación de productos para entregar a las 480
entidades que asisten con 250.000 kilos de alimentos.
"Hay temores por lo que pueda pasar en la
segunda mitad del año; creemos que las donaciones pueden caer y los pedidos,
en cambio, crecen", explicó Lorena Orellana, del área de
Comunicación Institucional de la Fundación Banco de Alimentos. Como
confirmando la necesidad de más y más ayuda, frente al portón de un galpón
lleno de cajas con comida, entraban y salían camionetas o trafics enclenques
de iglesias, escuelas, comedores comunitarios que esperaban el turno para
llevarse lo suyo. Los voluntarios de esas instituciones contaron que los
últimos meses la demanda crece y, si bien aún no están en los picos de 2001,
ya empiezan a hacer malabares para no dejar a nadie sin asistir.
Nota periodística de Verónica Dema, de la Redacción de
lanacion.com,
vdema@lanacion.com.ar
Contactos
Red de Bancos de Alimentos -
www.redbdea.org.ar
Banco de Alimentos -
www.bancodealimentos.org.ar |