25 de Marzo de 2008

Rugby en el Liceo
 

Señor Director:
 

"Después de mucho insistir, luchando contra los horarios de trabajo de sus padres (léase mi esposa y yo), y con el peso

 de la historia de rugby en sus antepasados familiares, mi hijo (de siete años en ese momento) logró, en pleno desarrollo del pasado Mundial de Francia, que definitivamente lo llevemos a jugar al rugby. En medio de la disyuntiva que se planteaba entre un importante club porteño donde he jugado y otro más importante aún del norte del Gran Buenos Aires donde jugó mi padre, por esas casualidades, un amigo nos recomendó que mi hijo comenzase a codearse con la «guinda» en el Círculo de ex Cadetes del Liceo Militar General San Martín.
 

"En estas líneas quiero expresar mi enorme satisfacción por haber tomado dicha decisión. Y quiero recomendarles a los padres lectores de La Nación, que lleven a sus hijos a este maravilloso club. En su escuelita de rugby, de la mano de Alejandro Mendoza, Oscar Davezac, más un importante grupo de colaboradores, el espíritu del rugby está en cada recodo. De amarillo, blanco y azul, parecería grabada la piel de los chicos que cada sábado a la mañana se llenan de felicidad."
 

Carta de lectores Diario La Nación
Alejandro Esteva
DNI 20.569.461