27 de Marzo de 2007

“A partir de la donación de una familia irlandesa se construyeron un colegio, una iglesia, un monasterio y un cementerio, en el cual descansan numerosos sacerdotes que dedicaron su vida a misionar, haciéndose cargo de administrar los sacramentos a lo largo de la vida y luego sepultar cristianamente a su gente. También, luego, dio cabida a encuentros, retiros y demás actividades, no sólo para la comunidad irlandesa, sino para toda la población.  Lamentablemente, hoy nos encontramos con la noticia de que el monasterio está en venta. Para ello, no se consultó a los ex alumnos ni a los fieles de las ciudades vecinas que, durante décadas y hasta hoy, vienen utilizando las instalaciones para retiros personales y grupales”.

Estas conmovedoras palabras son las que utilizó María Clara Fitzsimons, en su carta de lectores a La Nación del 02-02-2007.

El sábado 21 de abril se realizará un abrazo solidario en el Monasterio San Pablo, para apoyar la idea de que se preserve el edificio.                                                                                                                   

Otra  medida solidaria,  llevada a cabo hasta el momento, es el proyecto de Ley presentado en La Plata la semana pasada para declararlo Patrimonio Histórico Cultural.